Reflexión veranos de antaño y Pensamiento
para Proposición de estudio a la NASA.
Como cambian los veranos con
hijos.
Ayer estuvimos en la playa. Día familiar con
mis tíos, mis primos, mis padres, mi marido y como no: Torbellino.
No se si será asi, pero
si fue el ultimo domingo playero, estuvo genial. Con viento, pero a mí eso me
da igual. Mi bocata no tenía tierra asi que para mí, Estuvo genial.
La verdad es que nos lo pasamos
de escándalo, todos disfrutamos de la compañía de Torbellino y él disfruta de
todos los demás. Como somos tantos, ninguno se cansa del niño y la verdad es
que todos quieren atenderlo, con lo que a su padre y a mi, también nos sirve
para descansar un poco.
Mientras me sentaba un rato en la
orilla con mi silla de playa respirando la brisa del mar, disfrutando de ese
momento, observé a un grupo de chicas todas en línea con sus toallas,
impecables, peinaditas y no sé, creo que si me hubiera acercado hubieran olido
hasta a colonia (Yo antes tambien olía)..
De pronto me di cuenta de cómo
habían cambiado mis veranos, es decir: de estar en casa, levantarme a la hora
que quería y decir: “me arreglo y me doy
un repaso, cojo la toalla y me voy para
la playa a tostarme al sol vuelta y vuelta, como las chuletas, que con lo
blanca que soy..Ademas, en la moto tardo un plis.”
“El sistema chuletero” Es el único sistema que me sirve para coger
algo de color…Eso de: ¡Uy! a mí, por la calle se me pega..” conmigo no
va.
Me di cuenta de que me levanto a
las 10.00 con mucha suerte (y porque mi marido está cuidando del enano desde
las 8) para empezar a preparar cosas y salir de casa a las 12.30 dándonos
prisa: crema solar, gorrito, toalla, toallitas, pañales, potitos, postres,
galletas, piscina playa, inflador para la mega piscina, pala y rastrillo (que
siempre hay que buscarlos por casa) el cubo (que ya lo ha perdido), y nuestras
cosas…de las cuales, seguro siempre hay algo que se olvida. Se acabaron las motos. Ya en coche a todos lados...Cosa que tambien tiene tela: ahora, llega y aparca...te dan casi las 14.00 de la tarde. He llegado a estar casi 45 minutos buscando parking mientras digo: se nos olvida algo... Ya veras. Tengo la certeza de que se me ha olvidado algo.
Me di cuenta de que a veces,
cuando estoy en la playa, veo que me tenia que haber repasado las piernas
porque llevo cada pelángano que no sé si quitarlo, o peinarlo…Y de las axilas,
gracias a Dios, ya me he medio olvidado: me estoy haciendo la laser y vaya
cambio, porque eso de llegar a la playa y por casualidad levantas el brazo y te
encuentras ahí al primo pequeño de Chewwakka mientras dices: Mierda!!! Sabía que se me olvidaba algo!!!
Me dí cuenta además, de que ya
tengo que llevar silla de playa. Así al menos duro 3 minutos limpia de arena, digo
3 minutos porque si la silla está vacia, no pasa nada. Si torbellino me ve
sentada, ya se quiere sentar el. Encima mía, lleno de tierra, babeando y con
media playa metida en la rajilla del culo…media playa que acaba sobre mi pierna
pegada, claro.
Seguí observando a las chicas y me
dí cuenta de que ya se acabó eso de tenderme al sol boca abajo (ni boca arriba),
puesto que para Torbellino eso de encontrarse una toalla limpia en el suelo,
empiezo a sospechar que es que hay algún tipo de fuerza contra la que él no
puede luchar, que lo supera, que lo empuja y lo atrae para que PISE Y PISE Y
VUELVA A PISAR hasta que no quede ni un resquicio de toalla limpia. Por eso
digo lo de que lo estudie la NASA. Yo
creo que es alguna fuerza del universo…
En fin, suele hacerlo con mi
toalla, pero la de los vecinos, como me despiste…no se libran.
Además, lo que ya me parece
increíble, es que a el no le gusta mojarse los pies en el agua si está muy fría,
y últimamente está especialmente reacio a mojarse siquiera los pies en la
orilla, ¿cómo lo hace para que cuando viene a pisar mi toalla trae los pies
mojados?? Torbellino!! Lo haces aposta??!!!
Cuando lo veo, y lo llamo indignada
para que se quite mientras corro hacia mi pobre toalla, él huye partiéndose de
la risa, pero para entonces ya es tarde: la arena se pega a la toalla y solo
sale cuando yo me tumbo… mira que sacudo con fuerzas hasta que digo: imposible que quede tierra..
Pues no… sí que es posible. Además,
que parece que no la haya sacudido. Y luego que se me pegan de tal manera que o
me baño o no hay forma…y cuando el agua está bien, no pasa nada..pero cuando
está fría, miro a mi hijo con cara de…: ¬¬
te metía en el agua y te ibas a enterar. Te libras porque hay medusas y me
sentiría demasiado mala madre por haberme arriesgado a meterte en el agua solo
por venganza.
Luego mi marido me dice: nena, si es que estás blanca!! Ay que ver,
que por mas sol que tomes, es que no hay manera eh?? Jeje…No sé para qué te
molestas en tomarlo..
Yo lo miro con ojos de asesina en
serie eligiendo a su proxima víctima, mientras sacudo esa arena pegada con superglue a mi cuerpo y a mi toalla,
(y el me rehuye cual cerdo...mientras se ríe entre dientes.. ). Al terminar de sacudir, veo que ha servido de poco.
Dios mío, Si hay veces que salgo
del baño después de ducharme y me encuentro algún granito aun pegado!
Así como se me va a pegar el sol,
si me doy la vuelta sobre la toalla y estoy como las croquetas: Emborrizada en
tierra!!
Todo eso contando con que Torbellino no me pille desprevenida y se me tire encima cuando estoy mi toalla tumbada..Ya
entonces soy una croqueta total con algún que otro moco por ahí pegado, pero pienso agradecida: Al menos, hoy no ha meado ni a la toalla ni a mí.
Pues todas estas cosas las meditaba mientras tomaba el aire en la orilla, hasta que la abu del niño me
dijo: este chico no merienda?, y me sacó de mi ensimismamiento devolviéndome a
la realidad.
Torbellino se acercó, me abrazó y
me puso perdida de tierra una vez mas, y esa vez no me importó, he vivido mis
veranos a modo chuletero, cigarrito en mano, he disfrutado de esos momentos de
irte sin un granito de tierra de la playa, harta de dormir y de reir con mis
amigas, decir: vamos a recoger y tardar 5 minutos porque recoges tranquila...(y no 30 minutos como me pasa ahora..que encima, la mitad de las veces, siempre me dejo algo..) pero ahora voy acumulando otros momentos nuevos.
Es cierto que un niño en la playa
cansa (al menos el mío agota), pero también es cierto que disfruto, me río y
atesoro momentos que seguro en un futuro lejano los evocaré sentada a la orilla del mar, mientras veré a otras mamás jóvenes disfrutando de su reciente maternidad y diré para adentro lo que seguro han pensado todas las madres que ya han criado a sus hijos y ahora se dedican a ver a las demas:
Pardilla!!! para qué tiendes la toalla con tanto cuidado sino te va a durar!!!
Feliz fin de verano 2012!!!! Y espero que disfruteis de la llegada del nuevo curso con vuestros peques.